El centro de mecanizado Hermle C32 de Mebsa representa la cúspide de la innovación en mecanizado de precisión. Con su tecnología de cinco ejes y sistema de carga robotizada EROWA, es una herramienta clave para sectores industriales exigentes, desde la automoción hasta la industria nuclear.
El Hermle C32 está diseñado para manejar piezas de gran tamaño y complejidad con una precisión excepcional. Sus especificaciones técnicas incluyen:
– Área de trabajo: Capaz de manejar dimensiones de X: 650 mm, Y: 650 mm, Z: 500 mm, este centro de mecanizado ofrece un amplio rango de operación para piezas diversas.
– Capacidad de carga: Puede trabajar con piezas de hasta 1.000 Kg, con una altura máxima de 420 mm y un diámetro de hasta 650 mm, lo que lo hace ideal para componentes grandes y pesados.
– Velocidad del husillo: Con una velocidad máxima de 18.000 r.p.m., asegura operaciones rápidas y acabados precisos.
– Unidad de control TNC 640: Permite un control preciso y adaptable de las operaciones, mejorando la eficiencia y reduciendo el tiempo de inactividad.
El Hermle C32 es una herramienta versátil que se adapta a las necesidades de múltiples sectores:
En la industria automotriz, el Hermle C32 se utiliza para fabricar componentes críticos como motores y sistemas de suspensión. Su capacidad para manejar piezas complejas con alta precisión asegura que los vehículos sean seguros y eficientes.
Para la industria aeroespacial, la precisión es fundamental. El Hermle C32 permite la producción de componentes que deben resistir condiciones extremas y cumplir con estrictos estándares de calidad. Su tecnología avanzada garantiza que las piezas sean ligeras, pero robustas.
El sector nuclear requiere componentes de alta fiabilidad y precisión. El Hermle C32, con su capacidad para manejar materiales exigentes y realizar operaciones complejas, es esencial para la producción de piezas que garantizan la seguridad y eficiencia en instalaciones nucleares.
El uso del Hermle C32 en Mebsa no solo mejora la precisión y la calidad del producto final, sino que también optimiza la eficiencia operativa:
– Reducción de tiempos de ciclo: Gracias a su automatización avanzada y su capacidad de carga robotizada, el Hermle C32 minimiza el tiempo necesario para completar operaciones complejas.
– Mejora de la calidad: La construcción con grafito reduce las vibraciones durante el mecanizado, lo que resulta en piezas de mayor calidad y precisión.
– Flexibilidad operativa: La tecnología de cinco ejes permite realizar múltiples operaciones en una sola configuración, aumentando la flexibilidad y reduciendo la necesidad de reconfiguraciones frecuentes.
Clientes de Mebsa han elogiado la capacidad del Hermle C32 para mejorar significativamente la calidad de sus productos. Un cliente del sector automotriz señaló que el uso de este centro de mecanizado permitió reducir los tiempos de entrega y mejorar la precisión de sus componentes, aumentando la satisfacción del cliente y fortaleciendo su posición en el mercado.
Para saber más sobre cómo el Hermle C32 puede optimizar sus procesos de producción, contáctenos hoy mismo. Nuestro equipo está disponible para ofrecerle más información y discutir cómo esta tecnología puede integrarse en su operación.
Con el Hermle C32, Mebsa reafirma su compromiso con la excelencia en mecanizado, ofreciendo soluciones innovadoras que cumplen con las más altas expectativas de nuestros clientes en múltiples sectores industriales.